A finales del mes de julio, everis Solutions Sevilla se trasladó a las
nuevas instalaciones que la empresa alquiló en la flamante Torre Pelli para
liberar toda la segunda planta que hasta la fecha ocupaba en el edificio de
Cartuja. Dicho movimiento, según informaba la dirección, tiene su razón de ser
en el crecimiento de la plantilla de Centros, que necesita más espacio para
poder albergar a los más de 500 trabajadores que ya posee la empresa en
Sevilla.
Somos conscientes de que la reorganización de tal plantilla requiere
naturalmente de determinadas reformas para adecuar el nuevo espacio a los
equipos, mobiliario, servicios, despachos y resto de salas necesarias para la
actividad laboral, lo cual implica que durante un tiempo las instalaciones pueden no estar plenamente operativas. Sin embargo -como ya señalamos con las obras de
ampliación de las plantas -1 y 0- no podemos pasar por alto tampoco en esta
ocasión que la empresa sigue sin respetar los horarios de trabajo de un buen
número de compañeros que se ven obligados a realizar su trabajo en un entorno
laboral inadecuado debido a los efectos nocivos que genera el ruido y otros
inconvenientes que las obras inevitablemente producen.
Es cierto que en esta ocasión hemos detectado que las reformas comienzan a
partir de las 15:00 horas con lo que puede pensarse que están fuera de la
jornada intensiva de verano. Pero resulta que un año más la empresa, con la
ya rutinaria colaboración de CCOO y Actúa en el comité, ha incumplido en
varios proyectos el calendario laboral que ella misma fija a primeros de año,
modificando la jornada de verano mediante guardias no reguladas por convenio
sectorial ni mucho menos por la negociación colectiva, además de sostener otros
proyectos con horarios de trabajo discriminatorios todo el año. Todo ello
bajo el tan manido argumento de “las necesidades del servicio” mediante
el cual la empresa se intenta lavar las manos de su responsabilidad a la hora
de cumplir las leyes laborales, haciéndonos creer que la decisión en última
instancia es del cliente y everis no tiene más alternativa que plegarse a sus
designios ya que en caso contrario peligraría el servicio.
Es por eso que hemos trasladado nuestras quejas al Comité de Seguridad y
Salud, el órgano paritario y colegiado de participación destinado a la consulta
regular y periódica de las actuaciones de la empresa en materia de prevención
de riesgos, denunciando que nuevamente la empresa permite que se estén
realizando las obras dentro del horario de trabajo, afectando al desempeño de
los compañeros que las sufren.
Siendo ya la segunda vez en pocos meses que nos vemos obligados a dejar
constancia de esta situación, da la impresión de que la empresa, una vez
asegurada la prestación del servicio a sus clientes, no demuestra mucha
preocupación por la salud laboral de los trabajadores que, al fin y al
cabo, son los que cubren ese servicio en su nombre. Tampoco la empresa ha
tenido a bien en esta ocasión de informar con suficiente antelación de la
inhabilitación del comedor debido a las obras, teniendo muchos de ellos que
improvisar un lugar donde desayunar y comer o directamente hacerlo en un
restaurante de la zona. Por ello, es importante que si observáis alguna
anomalía en vuestro entorno de trabajo, nos lo comuniquéis a la mayor brevedad
posible para poder iniciar las acciones necesarias para solventar el problema.
