La filosofía de Everis de contratar a trabajadores jóvenes y recién titulados, que ya dejó claro el consejero delegado Benito Vázquez al indicar que "la edad media es de 32 años y me parece muy alta", junto con la intención de implantar un nuevo plan de carrera enfocado a la congelación salarial, debe hacernos a los trabajadores preguntarnos por nuestro futuro en esta empresa.
Reducir la edad media de los trabajadores de una empresa tiene un objetivo claro, ahorrar en costes laborales. Un trabajador con años de experiencia está, por norma general, mejor remunerado porque puede aportar conocimientos adquiridos durante esos años que un trabajador más joven, por lo general, no posee y porque habrá ido evolucionando en su carrera profesional hasta alcanzar un salario que refleje esa evolución. En Everis Centers, un trabajador recién titulado empieza cobrando 10.500 euros brutos anuales, menos de lo que debería cobrar como Programador Junior. Es evidente la intención de esta empresa al intentar reducir la media de edad. Pero ese plan choca con una ley natural que hace que los trabajadores envejezcamos irremediablemente y pone más que en entredicho la supuesta intención de la empresa de “retener el talento”.
Con el paso de los años, la media de edad de los trabajadores que ya están en Everis aumentará y la forma de reducir dicha edad media será contratar cada vez a más jóvenes. Cuanta mayor plantilla haya en el centro más jóvenes tendrán que contratar para que tenga un efecto en esa reducción de la media de edad. Es inevitable pues que se llegue a un límite con respecto a cuántos trabajadores jóvenes se puede contratar (límite definido por el mercado de trabajo y las posibilidades de negocio a las que pueda acceder la empresa). Entonces, ¿cómo encaja el envejecimiento natural de los trabajadores con la filosofía de Everis? Aquí es donde entran en juego los despidos y la congelación salarial.
Una forma de mantener una media de edad más baja es despedir a los trabajadores de mayor edad. Esto tiene un doble coste para la empresa. Por un lado, la indemnización por despido, y por otro, la pérdida de experiencia que se lleva ese trabajador. A Everis no le tiembla el pulso a la hora de despedir improcedentemente, no necesita motivos para mandar a la calle a cualquier trabajador. Pero existen métodos para ahorrar también en estos costes. La congelación salarial a la que Everis quiere someter a sus trabajadores al implantar el nuevo modelo de carrera es uno de ellos. Conforme un trabajador va envejeciendo, se le congela el sueldo de forma indefinida, por lo que su salario no supone un incremento de costes de un año a otro. Además, con el paso de los años y el incremento del coste de la vida, este trabajador estará perdiendo poder adquisitivo y se verá forzado en algún momento a abandonar la empresa (no podríamos vivir hoy en día con el salario medio de hace 30 años), sin ningún coste para esta.
Este es el futuro de los trabajadores de Everis si no nos unimos y nos organizamos para exigir unas condiciones de trabajo dignas. Tenemos que plantearnos ya movilizarnos para que la empresa se siente a negociar, movilizarnos para defender nuestros derechos y mejorar nuestras condiciones. Si queremos tener un futuro en esta empresa, tenemos que luchar para conseguirlo.
Desde la sección sindical de CSC en Everis Centers Sevilla vamos a trabajar sin descanso para organizar las movilizaciones necesarias que hagan entender a la empresa que debe sentarse con el comité para negociar unas condiciones dignas de trabajo, es decir, un Convenio de Empresa que garantice que los trabajadores podamos envejecer en Everis sin miedo, como señala la dirección de la empresa, a "tocar techo".
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